Será verdad que los años son solo números? Porque en los geriátricos y manicomios a nadie, digo de los pacientes les interesa el tiempo, ni saber de sus cumpleaños a diferencia del personal que mira la hora, como las visitas. La convivencia se gesta donde se esté y esta comunidad nos enseña diferentes del destiempo a recrear días y noches y no es que se la pasen añorando sus vidas pasadas, los hijos e hijas o familiares, simplemente aceptan estar ese día, el Hoy con sus compañeras y compañeros sin menoscabo de estar mejores o peores que otros.
Están en aceptación continua , de esa nuevas etapas de sus vidas, agradecidos de seguir viviendo lúcidas con la edad que tllevan, porque muchos han enterrado hermanos e hijos y nietos.
Siguen con ánimo de seguir en movimiento físico, de caminar y hacer tareas que les gusta pero hay una realidad obvia, el cuerpo, el organismo físico se deteriora, se muere de a poco a poco y sus rodillas, codos, caderas y piernas ya no les ayudan por mas empeño que hagan. Aplaudir y bailar les es ajeno, pero gozan al percibir el logro de una compañera o compañero.
Es cuando me repregunto, qué hacíamos o hacemos para tomar precauciones con nuestra alimentación, porque llegar a ser ancianos lúcidos, con típicos achaques, amerita cuidarse desde la niñez o cualquier etapa de la vida, y esta reflexión provoque un cambio de actitud, de pensamiento y conducta y en este caso, la alimentaria y no nos vamos a justificar y crear excusas y que las hay bien sustentadas, pero vamos a lo más simple de observar del por qué en esta era contemporánea y consumista de grandes adelantos científicos en tecnología, de robótica, nanotecnología, cibernética, farmacológica, alimentaria, …abundan harinas procesadas industrialmente, leches maternizadas, jugos edulcorantes de frutas naturales, bebidas carbonatadas, fast food y paremos de contar , pero no debemos callar por el aumento de enfermedades que se encontraban en adultos mayores y no en niños, los casos de diabetes sin contar familias prediabéticas e hipertensas, casos de diabetes en niños infantes o infartos fulminantes en jóvenes deportistas o adolescentes obesas con n intentos de suicidio o incluso ya se sabe qué alimentos suben o bajan los niveles de la hormona cortisol en el torrente sanguíneo – niveles altos tiene que ver con la depresión y ansiedad crónica y subir la serotonina y dopamina contra restan esos niveles-y deberíamos estar alerta porque en este 2020, según la O M S la depresión, será la segunda causa de invalidez en el mundo, después de las enfermedades cardiovasculares, cerca de 300 millones consumiendo antidepresivos y psicotrópicos, así pues tremendo negocio redondo y partamos de algo tan sencillo como es el preparar nuestras comidas nutritivas, partamos del amor consigo mismo y los seres más cercanos y luego sumemos más seres humanos, para que no sean cargas para sus familiares y esto es de Emergencia. Si el planeta está de SOS, también el ser humano, a punto de extinción, seamos serios y responsables con nuestras vidas, siquiera por única vez para que así nuestros hijos sean mejores seres humanos y podamos tener una vida contente, aún en la vejez, que no significa esperar la muerte o desearla…el mínimo control lo tenemos en casa y esa herramienta de lucha de largo bregar consiguiendo los reales o dinero no sea para envenenar a hijos y nietos. No hay mejor dulce que un mango, un cambur o banano, todo lo conseguimos en la sabia naturaleza, pero comprender que también somos los responsables de nuestras enfermedades y no caer tan jóvenes, en plena madurez con secuelas de las diabetes, hipertensión, derrames cerebrales, secuelas de enfermedades cardiovasculares, pulmonares, gastrointestinales, sin nombrar las enfermedades mentales…
Particularmente el promedio de edad de esta pequeña comunidad geriátrica, nombrada en el inicio es ochenta años, porque están entre 75 y 92 años con enfermedades crónicas del deterioro de los años, con enfermedades esqueléticos musculares, demencia senil, pero lo que me preocupa son los jóvenes, niños y de mediana edad que están sometidos al bombardeo consumista y son adictos o mejor dicho somos adictas a los azúcares y harinas refinadas, que se ha comprobado científicamente son dañinos y causantes de enfermedades antes de la me edad madura y apogeo cognitivo. Sabemos que las comidas industrializadas y las chatarras a corto y largo plazo generan envenenamiento porque las toxinas acidifican los órganos y el riñón y el hígado no pueden procesar grandes cantidades de calorías, azúcares y grasas con los añadidos del alcohol y cigarros…
La nutrición recomendada por los científicos de la alimentación es casi unánime de retomar el mundo verde y cultivar nuestros vegetales y hortalizas, vamos a una dieta hipocalórica ósea poca y nutricia, no son los platos hondos y llenos de arroz o fideos con mayonesa y salsa que nos obligaban a comer todo, y vuelta al retorno de prácticas culinarias de las abuelas con todas las verduras sancochadas y sin frituras. Estas prácticas alimentarias ahora están de moda y otras por salud, eran los tubérculos sancochados ya sean ñame, papa, ocumo, camote, yuca… por cierto la alimentación ancestral con granos de diversas formas y colores que tenemos a lo largo de nuestra patria americana, con animales de cacería han retornado como sitios exóticos y muchos turistas quedan boquiabiertos con los platos del chiguire, baba o dulces de gusano del moriche En este punto es importante recapacitar porque muchas personas creen que es una moda evitar en lo posible dejar de comer carne y ser vegetariano o vegano, el cual ahora ya no es una cuestión de gusto o moda porque pasó a ser una emergencia de salud por la toxicidad de las grasa saturadas en el organismo y fuente de bacterias o virus pero lo cruento es el aumento del dióxido de carbono, generado por los animales en su proceso de crianza y también las aves que sobreviven en condiciones traumáticas de hacinamiento y que, para ser fuente de ‘alimento. Son realidades que nos deberían llevar a reflexión sobre la crianza de animales en pequeñas fin cas de pastoreo, aves de granja huevos de corral…que aún notamos…la vuelta al conuco, a la chacra , a trabajar la tierra con abonos orgánicos y de alguna forma evitar agentes pesticidas o vertederos de basura a los ríos que están convertidos en cloacas. La sequía y desrtificación es otra realidad y ya los ríos se están secando y la hambruna en zonas de la india comenzó por falta del líquido vital y aquí cerquita al sur de México la desnutrición y muerte infantil por sequía y contaminación es alarmante.
Es tenebroso repensar en cómo y por qué hemos caído a este infiernillo de todos los días en saber que nos estamos envenenando y matando de a poquito a nuestros hijos e hijas, pero siempre hay salidas, y somos seres inteligentes, que les damos la vuelta a esta locura de la crisis alimentaria del planeta ligada a la emergencia ambiental. Cómo y qué hacer? Lo primero es reflexionar y programar el dia a dia, como los ancianos anteriormente citados, que tienen una alegría de vivir y quieren seguir viviendo más … la motivación ayuda a buscar información sobre la alimentación de harinas refinadas versus naturales, dulces de las frutas naturales versus caramelos y chocolates, la leche y quesos versus yogourt, grasas de aceites de soya versus de oliva ….el asunto es que se busque sustituir …mientras mas alcalinicemos el organismo vamos a introducir oxígeno al cuerpo y esto se consigue con los vegetales crudos, en ensaladas, jugos verdes de espinacas, cale, remolachas, zanahorias y naranjas, mangos, cambures fuente de azúcares, y de proteínas las lentejas, garbanzos…Todo proceso conlleva aceptación y cambio de actitud y reconocer nuestras adicciones alimentarias que son recreadas y reforzadas por el sistema consumista y mas terrible es que somos nosotras como madres y padres quienes habituamos a nuestra descendencia a este ritual macabro de generar enfermedades que son prevenibles- llevan tiempo en su preparación es cierto y conlleva cambios para mejorar la salud, fuente de vida – como en todo es atrevernos a dar el primer paso a cambiar, que aún estamos a tiempo y no forzados por la hecatombe planetaria e incluso parto de la necesaria responsabilidad de la familia de prepararnos en procesos de resiliencia, tanto en las escuelas y universidades por la educación alimentaria y ambiental que están ligadas y no es un S O S tremendista sino Nuestra responsabilidad interdependiente en este planeta tierra. Los campesinos e indígenas son grandes cuidadores ambientales y defensores de la ecología y deberíamos enlazar y trabajar en conjunto.
Creemos que la documentación es necesaria y se elabore un plan de vida con nuestra responsabilidad de vida en el planeta, al que estamos asesinando todos los días con desperdicios que lanzamos al río, los contaminantes que usamos para supuestamente limpiar la casa, el uso desmedido del agua potable, el cloro y agentes tóxicos usados normalmente en el uso cotidiano…bien nada es fácil, cuando hemos sido condicionados en supuestas verdades para cambiar de actitudes, pero tenemos el intelecto, la reflexión y asumir que somos consecuencias de múltiples factores que han disociado nuestras vidas y podemos poner un stop, si importar la edad o numero que se tenga para reiniciar con la familia , otras formas posibles de cuido que nos harán menos dependientes del sistema y mas autonomía y ser responsable a tener una vejez divertida con sus achaque propios, que son incluso caudal de humor de sus vidas, así pues estamos a inicio de una década nueva y también del año de la rata de madera según el calendario chino, que nos traen muy buenos augurios y no olvidar que somos constructores de nuestros destinos.